Periodista victor de la Serna

El adiós a Víctor de la Serna: el periodista que cocinó noticias y narrativa

Nos deja Víctor de la Serna, un pilar del periodismo español y amante del buen vino. ¡Descubre su legado!

El mundo del periodismo se encuentra de luto tras el fallecimiento de Víctor de la Serna, cofundador del diario El Mundo, quien ha dejado su huella en la historia de la información española. Con 77 años, Víctor sufrió un infarto que lo llevó a abandonar un mundo que amaba profundamente. A lo largo de su carrera, fue un referente en la cobertura de muchos sucesos que marcaron nuestra historia, convirtiéndose en una voz autorizada y confiable.

Nacido para contar historias, Víctor de la Serna no solo se destacó en el ámbito del periodismo político, sino que también era un apasionado del deporte, especialmente del baloncesto, escribiendo bajo el seudónimo de Vicente Salaner. Su capacidad para conectar con el público, sumado a su aguda percepción de los eventos deportivos, le valió un lugar especial en el corazón de los aficionados y colegas por igual. Gracias a su enfoque único, logró humanizar cada noticia, haciendo que sus lectores sintieran cada triunfo y derrota como si fueran propios.

Además de sus logros periodísticos, de la Serna era un amante de la gastronomía, una pasión que también reflejó a lo largo de su vida. Era conocido por tener su propia bodega, lo que le permitía disfrutar de la buena mesa, generando un vínculo aún más cercano con su redacción, donde las sobremesas eran comunes. Su amor por la comida y el vino le permitió cultivar amistad y camaradería entre los suyos, creando un ambiente laboral que favorecía la creatividad y la colaboración.

El legado de Víctor de la Serna es vasto y merece ser recordado. Su visión pionera en el ámbito del periodismo ha inspirado a nuevas generaciones a alzar su voz e innovar en la forma de presentar las noticias. Con su partida, no solo se apaga una gran voz del periodismo español, sino que se cierra un capítulo de un tiempo donde la verdad y la calidad informativa eran el norte a seguir. Su impacto perdura, y sus historias seguirán siendo fuente de sabiduría y reflexión.

Interesantemente, Víctor de la Serna cofundó El Mundo en 1989, justo cuando España comenzaba a ser testigo de un nuevo periodo democrático. Su trabajo fue crucial para narrar los cambios sociales y políticos que marcaron esa década. Además, su seudónimo, Vicente Salaner, no solo le permitió diversificar su carrera, sino que también le dotó de un aire de misterio en el mundo del periodismo deportivo. Su legado vivirá en cada historia que leamos y en cada copa de vino que brindemos a su memoria.