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¡Adiós en el Cafetón! La trágica despedida de dos hosteleros avilesinos que conmovió a España

Carlos y Maribel, dueños del Cafetón, se despidieron en un mensaje que rompió corazones. ¿Qué ocurrió realmente? Aquí te contamos la historia detrás de su trágica decisión.

El pasado lunes, la tranquila localidad de Avilés se vio sacudida por una noticia devastadora: Carlos García Rubio y su esposa Maribel Alberti, conocidos hosteleros al frente del bar 'El Cafetón', perdieron la vida tras arrojarse desde un sexto piso de un hotel en León. Esa misma mañana, la pareja había enviado un WhatsApp a sus familiares y amigos, diciendo un conmovedor «Se acabó. Os queremos mucho», lo que dejó a todos en shock. El bar que habían regentado por años había cerrado solo una semana antes y nadie sospechaba que tras esta decisión se escondía una tragedia tan profunda.

A medida que los detalles de su última mañana comenzaron a salir a la luz, las autoridades confirmaron que la pareja había estado lidiando con problemas personales. La policía mantiene como principal hipótesis la muerte voluntaria, lo que ahonda la tristeza en su entorno, que había perdido contacto con ellos desde el cierre del bar. Según los amigos, Carlos y Maribel eran un pilar no sólo en su negocio, sino en la comunidad de Avilés, donde muchos los admiraban por su dedicación y amor al trabajo.

La despedida de los dos hosteleros ha desatado una ola de dolor y reflexión sobre la salud mental en el sector de la hostelería, que a menudo se enfrenta a rigurosas exigencias y presiones económicas. A través de las redes sociales, amigos y clientes han expresado su tristeza y compartido historias memorables de su tiempo en el Cafetón, un lugar que siempre estuvo lleno de risas y buena comida. La comunidad avilesina se une en este luto, recordando a una pareja querida y a un bar que será difícil de reemplazar.

Cabe destacar que, según estadísticas recientes, el suicidio es una de las principales causas de muerte en España, afectando especialmente a profesionales del sector de la hostelería, donde la presión puede ser abrumadora. A raíz de esta tragedia, se hace indispensable abrir un diálogo sobre la salud mental en el trabajo y cómo se pueden crear entornos más saludables y solidarios. En honor a Carlos y Maribel, quizás este sea el momento de recordar que siempre hay un camino para buscar ayuda y apoyo, y que, aunque el Cafetón ha cerrado sus puertas, su legado de amor y comunidad seguirá vivo en Avilés.

Además, se estima que más del 50% de los trabajadores de la hostelería en España han experimentado niveles significativos de estrés laboral en algún momento. Es crucial que estas voces sean escuchadas y se desarrollen iniciativas que fomenten la salud mental y el bienestar en el trabajo. La vida es efímera, y como nos enseñaron Carlos y Maribel, es vital buscar apoyo y compartir nuestros sentimientos con quienes más queremos.